Las enseñanzas de la selección natural y su respectiva evolución de Darwin atraviesan todas las disciplinas. Por cierto que para la ciencia es un libro de cabecera, pero la educación, la economía, el marketing, los negocios, el arte, la innovación, los recursos humanos, los procesos creativos y un sinfín de disciplinas se han inspirado en las enseñanzas de Charles Darwin.
En su libro sobre la selección natural, quisiera comentar algunas ideas que me quedaron dando vuelta.
La primera de ellas es como la homogeneidad de especies y la falta de diversidad perjudica la evolución de la misma. Darwin nos pone como ejemplo dos hectáreas, una de ellas plantada solo con una variedad de árboles y la otra con diversas especies. Él observa que el mismo árbol plantado en a diversidad es más fuerte y frondosos que el plantado solo con su especie. La homogeneidad de un ecosistema aplana la especie y atrofia su reproducción. En la amplia variedad se fortalecen las diferencias y se convive con mayor particularidad y riqueza. Algo similar ocurre en la selección sexual que plantea Darwin, los entornos que tienden a ser homogéneos y carentes de diversidad están destinados a una evolución sexual única, carente de diferencia y roles. La evolución de la especie funciona por fortaleza, pero también por diferencia marcada entre macho y hembra.
Esta idea que el autor profundizo en el S.XIX me hace reflexionar y llevar a explicar algunas características de nuestra sociedad. La permanente aislación social y geográfica de sectores más acomodados, no todos, hace que busquen barrios más alejados y menos accesibles para todos. Esto homogeneiza un sector, privándolo de la diversidad propia del bosque. Para Darwin, esto disminuye su fuerza e inteligencia. ¿Será que Darwin ya predijo que nuestra sociedad se autodestruía con la aislación social?
Por otro lado, la discusión de género y diversidad sexual se ha acrecentado en la última década. El planteamiento de lo no binario y la expresión en términos masivos de una sociedad, que dependiendo del sector, entiende y reclama una diversidad de género, sexual y reproductiva como nunca se había planteado antes. La igualdad de acceso y la flexibilidad de rol ha dado paso en algunos sectores a que se difuminen las diferencias sexuales y reproductivas. ¿Acaso Darwin ya predijo que la falta de diversidad social provocaría, la falta de definición de roles en la reproducción.?
Como la vieja moraleja que nos cuenta la historia de un alacrán quien le pide a un sapo que lo cruce en el río; a lo que el sapo le dice: no te llevaré porque me puedes matar en el camino. No, dice el alacrán, no sé nadar, si te mato moriremos los dos. El sapo acepta cruzarlo y en la mitad del viaje en pleno rio el alacrán entierra su lanza y antes de morir el sapo le dice: porque lo hiciste si moriremos los dos. A lo que el escorpión responde, no puedo evitar lo que está en mi naturaleza. Será que nuestra naturaleza de Homo sapiens nos hizo mejorar nuestra especie por medio de la selección natural para conquistar el mundo y después comenzar su destrucción. ¿Seremos alacranes para Darwin?.
Esto es una reflexión mientras cruzo el río o la ruta, Gracias por tu lectura.
Nicolás Fontaine
Faro de la Nueva Extremadura
14 de enero 2023