Hace 17 años qué Garret Sutton viene publicando el libro, inicia tu propia corporación, esta edición actualizada de Aguilar y con prólogo de Robert T. kiyosaki autor de padre rico y padre pobre. Garret tiene como objetivo desmenuzar las estructuras y entidades que permiten la protección de activos y la formación de empresas. Comienza desde el significado de la palabra entidad referente a una organización, ya sea privada o pública, que tiene una identidad distinta a la de sus miembros. Se deriva de la palabra en latín ens, qué quiere decir algo o una cosa que existe separada y con vida propia de la de sus propietarios. El libro se va haciendo cargo y explicando al lector tanto la conformación y las diferencias entre: corporación C, corporación S, sociedad de responsabilidad limitada, sociedad limitada, sociedad general, y empresa unipersonal.
Si bien el libro se refiere a la estructura actual que rige en Estados Unidos, toma como referencia la historia de estas corporaciones; como el caso de las corporaciones marítimas que se usaban en el siglo XVI para proteger a los inversionistas de las empresas marítimas. Antes del uso de las corporaciones, los inversionistas se reunían, formaban sociedades, equipaban un barco y lo ponían en alta mar para realizar intercambios comerciales. Si el barco llegaba a perderse en el mar, los inversionistas no solo perdían todo, también eran demandados de manera personal por los distintos acreedores. Naturalmente, este tipo de exposición desalentaba a la gente que prefería no arriesgarse y, claro, la actividad económica se veía afectada. Al notar esto, la corona inglesa y las Cortes permitieron la constitución de corporaciones que limitarán los riesgos y las responsabilidades a la corporación misma; los accionistas, es decir, los inversionistas de la corporación solo eran responsables por su aportación en el negocio. Esto marcó un desarrollo significativo en la historia económica del mundo.
Sutton, comparte los hechos históricos y las comparaciones y beneficios de una figura tributaria, frente a otras, además de casos que permiten al lector no especializado comprender de mejor forma estas diferencias. De tal manera que la “lectura de este libro te permitirá trabajar de una mejor manera con tus asesores profesionales porque no tendrán que invertir mucho tiempo en explicarte la problemática fiscal ni las restricciones de las estrategias de responsabilidad”, nos dice el autor.
Capítulo especial dedicado a las corporaciones de beneficio público. Donde realiza una revisión de la historia, desde Ford motor Company hasta la creación de las corporaciones B, detallando la polémica de beneficios otorgados a los accionistas y la demanda interpuesta por los hermanos Dodge como la creación de la empresa Cadillac. Interesante relación con el famoso artículo de Steven D. Salomon “idealismo que podría dejar a los accionistas deseando el pragmatismo”.
El futuro de las corporaciones podrían ser B dado el movimiento hacia la inversión socialmente responsable. Actualmente, más de 2 billones de dólares o cerca del 10 % de todos los activos De Estados Unidos en administración están comprometidos con inversiones socialmente responsables. Independiente del país que vivamos, este libro es muy útil para emprendedores o aquellos que quieren serlo dibujando la forma en la cual se alojan las estructuras tributarias.
Nicolás Fontaine
Faro de La Nueva Extremadura
5 de mayo 2022