
En apariencia, el personaje de Nicolás Fontaine (37) tiene una vida sólida y ordenada. Algo que se refleja en la forma “casi” obsesiva en que ordena el cubierto del restaurante cuando va a cenar con Cristina. Pero cuando se encuentra con un video de ella cantando que los hombres “valen callampa” en Youtube, decide salir arrancando.